Tras un tiempo sin poder apenas salir en bici debido al mal tiempo, toca comenzar a acumular kilómetros de cara a los objetivos del verano. La ruta recorrió la zona entre Oviedo, Avilés y Grado. Sin ninguna subida remarcable, pero con múltiples repechos y toboganes en los que al final acumulé casi 1000m de desnivel en tan sólo 73kms.
Salgo de Oviedo al mediodía. La temperatura es muy buena para esta época del año, casi 20º, por lo que voy de corto. Lo único que malo es que la temperatura es buena porque sopla mucho viento y en alguna zona de la ruta se hace bastante incómodo.
Me dirijo hacia Lugones apra ir a Avilés por La Miranda. Justo al llegar a Lugones pincho, y además la rueda trasera, que siempre es más incómoda de arreglar.
Una vez reparado el pinchazo continuo la ruta y corono La Miranda, que por la vertiente de Posada de Llanera no tiene ninguna dificultad.
En el falso llano posterior a coronar La Miranda hay unas vistas espectaculares, aunque hoy los Picos de Europa están algo tapados por las nubes.
Tras bajar La Miranda sigo hacia Avilés por terreno muy cómodo que casi siempre pica ligeramente para abajo.
En Los Campos me desvío hacia Trubia. Esta carretera es un continuo sube-baja, con subidas de un par de kilómetros al 5-6% cada poco.
En Santa Cruz de Llanera me desvío hacia Peñaflor. Esta zona es muy abierta y el viento me da bastante guerra.
Antes de llegar a Peñaflor me desvío hacia Valduno. El Nalón va muy cargado de agua, se notan las lluvias de estos días.
En Valduno me desvío de nuevo hacia la general de Grado para volver a Oviedo por Fuejo y Sograndio. Se me hacen largas las dos subidas. No tengo nada de fondo y a partir de las dos horas de ruta voy con la reserva encendida.
Y en las últimas llego a Oviedo. Ha estado guapa la ruta, a ver si no pasa mucho tiempo hasta que pueda volver a salir.