La subida a Yernes es una de mis favoritas de la zona central asturiana. Tres vertientes totalmente diferentes entre si, en un entorno precioso.
La vertiente elegida este día fue la de Rañeces. Es la más larga y tendida, pero incluye tramos de dificultad elevada. La ruta tuvo en total 100kms y 1400m de desnivel.



Salimos de Oviedo Marcos y yo sobre las 10 de la mañana. Vamos hasta Trubia por la senda verde y de allí a Grado por la general. El camino es muy cómodo exceptuando el repecho de Fuejo y las bajas temperaturas que sufrimos, sobre todo en las zonas de sombra.
Al legar a grado cogemos la carretera que lleva a Villabre, y en Alcubiella nos desviamos hacia Yernes. 
Comienza la subida y nos encontramos ya la zona más dura de la subida con pendientes constantes al 8-10%.


Gracias a la pendiente ganamos altura rápidamente. Pronto queda el valle a nuestros pies, donde podemos ver la Torre de Villanueva.


Excepto alguna parte que tiene arbolado, la mayor parte de estos kilómetros iniciales es muy abierta. Podemos ver el valle del río Cubia a nuestra derecha.



Tras dos kilómetros y medio muy duros, llegamos a Rañeces. Allí cambiamos de valle por una zona de pendientes muy suaves. A nuestra izquierda tenemos el valle de Coalla, famoso por las andanzas de su Conde durante la Edad media.


Entramos de nuevo en otra zona de la subida. Ahora, durante casi 4kms, la pendiente rondará el 9-10%, con algún pequeño descanso que hace que la media disminuya.


Volvemos a cambiar de valle y a nuestra derecha se abren unas amplias y espectaculares vistas.




Tras algo más de 8kms de subida, acabamos la parte dura de la subida. De aquí a Yernes nos quedan unos 7kms de toboganes.


Entramos en le concejo de Yernes y Tameza y el paisaje se hace aún más bonito. Praderas y cabañas nos acompañarán de aquí a la cima.





Según nos acercamos a Yernes los toboganes son cada vez más duros. Las pendientes llegan a superar ampliamente el 10%.




En medio de un paisaje espectacular, llegamos a Yernes. Nos hacemos la foto de rigor en el cartel del pueblo.


Bajamos hacia la carretera del Maravio. El paisaje, aunque parezca imposible, se hace aún más espectacular.






Cuando llegamos a la carretera del Maravio comenzamos a bajar hacia Grado. En esta época del año luce preciosa, con las hojas de los árboles en los laterales de la carretera.






Sin mayor dificultad llegamos a Grado. Desde allí volvemos a Oviedo por la general. Terreno pestoso con las subidas a Fuejo y Sograndio, que pese a no ser gran cosa, se hacen duras como final de ruta.



Y llegamos a Oviedo con 100kms y la sensación de haber hecho una ruta grande en cuanto a belleza.

Hace unos meses veíamos la subida a Valdedo desde Puente Polea por su vertiente principal. Hoy vamos a ver una vertiente alternativa a ésa, la cual pasa por el pueblo de Illaso.
Situada en su totalidad en el concejo de Villayón, esta vertiente es mucho más irregular que la otra, con pendientes que alcanzan el 20% intercaladas entre tramos muy suaves.


La subida comienza en Puente Polea, lugar también de inicio de La Marta.


Circularemos por la AS-35 rumbo a Boal. En estos primeros metros de ascensión encontramos pendientes que rondan el 7-8%.


Estamos al aldo del río y la vegetación que nos rodea es exuberante.


Tras unos 600m de subida, nos desviamos a nuestra derecha rumbo a Illaso.


La carretera se estrecha, pero el asfalto sigue en perfecto estado. La pendiente sigue siendo muy constante en torno al 7-8%.



Tras 2kms de ascensión llegamos a Illaso. Pero no llegaremos a entrar en el pueblo.



Poco antes de entrar en el pueblo nos desviaremos a la izquierda, en un cruce sin señalizar. Justo allí encontramos la rampa más dura de toda la subida, que alcanza el 20%.


A partir del desvío la subida va a tirones, alternando rampas que superan ampliamente el 10% con zonas con pendientes muy moderadas.



Al fondo vemos el pueblo de Murias. Antes y después del pueblo vamos a encontrar rampas muy duras.



Poco después cruzamos el pueblo de Argolellas. De nuevo la pendiente superará el doble dígito al cruzar el pueblo.


Tras 5,7kms de subida llegamos al punto más alto de la ascensión. En esta zona el asfalto está en mal estado.
De aquí hasta Valdedo atravesaremos una zona de suaves toboganes con tendencia descendente.


A nuestra derecha tendremos magníficas vistas del valle del Navia y la cola de la presa de Arbón.


Poco antes de llegar a Valdedo pasaremos por al lado de la Ermita de Nuestra Señora de las Virtudes. También hay allí una preciosa área recreativa.


Poco antes de llegar a Valdedo disfrutaremos de amplias vistas de las Sierras de Carondio y Valledor.




A unos 200m de la cima volvemos a salir a la carretera principal, la AS-35, justo a la entrada de Valdedo, donde finalizará la subida.